La extraña sensación de que aquellos que creías que eran tus amigos pasaban el tiempo contigo sólo porque sus "verdaderos amigos" aun no llegaban a sus vidas.
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He descubierto que yo puedo hacer amigos solamente en la total desesperación o en la hilaridad. De otro modo me es imposible.
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9/24/2011
Noches solitarias como ésta, me acompaña tu fantasma mudo. Entras y sales por mi puerta, vienes y te vas. No dices nada. Yo ya casi te olvido. Estoy a punto. Ya eres casi todo etéreo y nada de carne; ya casi es todo tu cuerpo sólo un recuerdo. Ya olvidé tu aliento, tu piel tostada, tu acento. Pero abro las manos y mido tu altura perfecta, palmo a palmo. Y acaricio la textura dura de tu pelo corto. Intento recordar: me ato a las palabras, las enredo en mis dedos y antes de despertar sueño con tomarte en mi boca. Olvido mis torpezas y queda, depurado y desnudo, sólo el deseo. No quiero olvidar. Quiero tenerte todo en mi cabeza.
9/23/2011
El deseo
Porque el deseo es una pregunta cuya respuesta nadie sabe.
Nunca se dijeron palabras tan ciertas, maestro Cernuda.
Nunca se dijeron palabras tan ciertas, maestro Cernuda.
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Cuerpo que no eres mío,
Días de cachondez,
El minotauro
9/19/2011
De los machos incomprendidos.
Pendejo: si te vas a sentar dos horas a esperar que te comprenda, intenta comprenderme tú también. Si quieres que te escuchen, aprende a oír, que para eso la vida te dió dos orejas. Si quieres intrigarme, por lo menos ten ideas originales o sentido del humor. No te pares delante mío, tomándote tan en serio y tan digno, y esperes que te aplauda tus diatribas como si fueran máximas. O sea, aprende a dialogar y deja ese delirio de que tu pene es como un micrófono abierto y tú Jesucristo Superstar. No eres especial. He conocido a miles como tú.
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El imbécil de turno,
Monstruos
Hay que seguir los teaches de Peaches y sencillamente fuck the pain away.
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Días de cachondez,
Juventud Sónica
9/17/2011
Siempre me gusta vivir, ya lo decía...
Vale la pena acordarse de lo pequeño que es realmente uno dentro del mundo. La ventaja más grande del ser humano es la de poder maravillarse todavía de cosas que escapan su imaginación y su conocimiento. Es el poder de, aún, permitirse interpretar la realidad.
Cuando Van Gogh se asomó a la ventana de su sanatorio y miro las estrellas de Arlés y vio a Dios en ellas y las pintó tal cual, llevaba a cabo un rito milenario. El mismo que nos hizo adorar al sol antes, el mismo que nos hace rezar para que el calentamiento global no nos mate ahora.
Nuestra existencia fugaz es hermosa.
Cuando Van Gogh se asomó a la ventana de su sanatorio y miro las estrellas de Arlés y vio a Dios en ellas y las pintó tal cual, llevaba a cabo un rito milenario. El mismo que nos hizo adorar al sol antes, el mismo que nos hace rezar para que el calentamiento global no nos mate ahora.
Nuestra existencia fugaz es hermosa.
9/10/2011
La edad
El peor síntoma de la vejez es que uno ya no recuerda nada. Me aterra esa soledad desprovista de datos y memorias; de rostros fugaces o de palabras que se dijeron y quedaron en algún lugar del tiempo sin que nadie las arrastre a este presente.
El peor síntoma de la vejez es perder la vital curiosidad por la gente y las cosas. Que se malogre la capacidad de hacer preguntas y de querer escuchar la respuesta, que a los días los vele el desinterés inescapable.
Si la vida es búsqueda, la vejez es el olvido.
Leo sinónimos de "perder". Entre éstos aparece la palabra "desvanecer". Eso es la vejez.
El peor síntoma de la vejez es perder la vital curiosidad por la gente y las cosas. Que se malogre la capacidad de hacer preguntas y de querer escuchar la respuesta, que a los días los vele el desinterés inescapable.
Si la vida es búsqueda, la vejez es el olvido.
Leo sinónimos de "perder". Entre éstos aparece la palabra "desvanecer". Eso es la vejez.
9/06/2011
9/02/2011
Estabilidad.
Es cierto eso de que lo que deseas se hace verdad. Digo, en cierta medida. Puedo haber deseado estar muerta millones de veces y acá sigo, a menos que la muerte sea una continuación perpetua de la detestable rutina. Conocí hijos e hijas de puta de todos los colores que inspiraron en mí el deseo de estar absoluta y completamente sola y en ese entonces me quejaba de lo caótica que era mi vida y llegué a tener bajones bárbaros. No hay glamour en nada de eso, reitero. Imagino que en ese entonces pedía orden y estabilidad como quien pide un periódico de Radiohead en Union Square: con lágrimas, puños, revolcándome en el suelo como una babosa cuando le echan sal. ¿Y ahora? Tedio.
Después de una miríada de tragicomedias mal llevadas, del sube-baja emocional, del mete-saca sexual, del tira-jala del poder y en general, después de cagarla y de que me caguen, me doy cuenta de que la estabilidad tampoco es lo mío.
Después de una miríada de tragicomedias mal llevadas, del sube-baja emocional, del mete-saca sexual, del tira-jala del poder y en general, después de cagarla y de que me caguen, me doy cuenta de que la estabilidad tampoco es lo mío.
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