5/28/2007
Ironía
Oh, eterna ironía la de odiar el lugar en el que vives y, así, de amar a aquél que pisa tan alegremente estas calles sedientas. Irónico será el recuerdo: odiar y amar al mismo tiempo. Irónica la coincidencia, el lugar y el momento: Dios juega con sus hilillos al destino. Peina su pelo, acaricia su piel: lo hace inevitable, inminente, ineludible.
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